lunes, julio 17, 2006

Vueltas y más vueltas


Cristian nos decía: "Siento que hicimos más". Así se sentía él, y nosotros también el año pasado, cuando no sé cómo nos ganaron. Sólo que ahora él estaba en el otro bando, pese a compartir generación con nosotros el año pasado.
La noche comenzó con incertidumbre: miraba desesperado, esperanzado y acaso angustiado alrededor pero no hallaba su figura de baja estatura, ni su pelo largo, ni su bonito rostro: no había señales de ella. Me topé con la chica de mi ensayo anterior, la misma del trasero apoteósico. Lucía divina, como siempre. Bien destapadita, con su fina silueta pronunciada como nunca. La tomé de la cintura, un beso en la mejilla, de ahí una larga charla y no la volví a ver, hasta el gélido adiós al final de la noche. Al salir de ese encuentro luego fue otro con un fugaz amorío de hace un par de años. Otro tibio beso, ya que andaba con su "pololo": un flaite cualquiera, como los hay muchos. "Caíste bajo, (...)" pensé. *(Nota del autor: Para evitarme más tratos con tipos con los que no me interesa tratar, omitiré este nombre)
Dándome vueltas encontré a Luis con su "marca personal". "Sácatela" le dije un rato después, porque a mí en realidad me incomodaba que un flaco raquítico que hace 3 años era un pastel hazmerreír, ahora, por estar en la putita Escuela Naval anduviera mandoneando a Raimundo y todo mundo, y botándose a choro y/o flaite. Además que su amigo también era bastante pastel.
La llamé, y daba tono de ocupado. Le envié un mensaje, al que respondía con un ring. Ahí hasta que me resigné, y la dejé en paz por esa noche. Con la mente aún en otro lado comencé a dar vueltas, oteando a ver cómo se avisoraba el panorama. Reinaba el nerviosismo. En nosotros y ellos, disimulado. Y cuando llegó el momento del baile final, y dimos rienda suelta, entre leseo y en serio a los enardecidos cánticos de "¡Rojos culiaos, rojos culiaos!" o "Eso de ser campeones (...) y por eso te digo: ¡Rojo conchetumadre!" me sentí en la terapia ideal, saltando, gritando hasta más no poder, pegándole al flaco raquítico, empujando, gritando a las chicas que exhibían sus abultados abdómenes con algunos kilos de más (a excepción de nuestra reina), sudando para quedar lo mejor lo posible con su alianza.
En el intermedio ése salí a tomar el aire de aquella fría noche, a dar más vueltas; me tomé una Pepsi y comencé a acordarme y pensar sobre un par de promesas que podía cobrar a modo de revancha por mi mal comienzo de noche. Me topé con una de ellas, me dijo que la esperara, que iba "a tomar agua", y luego no la vi más. Me cansé, fui donde Mariela a pedirle un cigarro y partimos a fumarnos el último que restaba en la cajetilla naranja de Pall Mall. Charlamos un buen rato, sobre la vida, de su relación con el enfermo, sobre su inseguridad y sus planes. Entonces, la voz del animador amateur indicaba dentro del salón, a lo lejos, que llegaba la entrega de los puntajes finales y la coronación de la Reina. Era el momento final: la gloria o la humillación.
Con Mariela aferrada de mi mano nos abrimos paso a la posición de los de Cuarto y sus simpatizantes a esperar el desenlace.
Andrés, con su camisa sobria a rayas, le puso talento. Con una voz de locutor que sacó de no sé dónde, daba los resultados. Cuando llegó al momento del primer lugar, bajé la vista, nervioso. Entonces, al escuchar el bendito "Alianza Azul" que nos daba como ganadores, se generó un auténtico terremoto: saltos, empujones, gritos sin precedentes y luego la caravana, el trencito y el carnaval en el patio. Qué rico se sentía abrazarse, felicitarse, saltar, gritar y cantar hasta quedar sin aire, frente a los perdedores: estar en ese minúsculo y efímero Olimpo aunque fuese por diez minutos. En un ambiente ya más distendido, las anécdotas y conversaciones sobre la victoria se dispersaron, en tanto que la fiesta continuaba adentro, para aquellos ajenos a la alegría o decepción (como Jorge Ariel, un loser de tomo y lomo algunos años atrás en mi población, y que ahora, con un look emo andaba con una lindísima y p... chica de segundo) o simplemente para quienes a los que les resultaba indiferente.
Seguí dando vueltas, crucé una mirada y una sonrisa con la profesora de Filosofía, entre luces que iban y venían. Conversé con su amiga, que me contaba sobre sus penurias e infortunios de niña ilusionada con un tipo que sale con una chica en cada fiesta y con facha de gay. Me tomé ahora una Crush. Busqué la otra promesa que me quedaba, pero me di cuenta que ya era inconsumable. La noche se apagaba para mí: irónico, pues en ese mismo momento se encendían las luces del salón, indicando el fin del perreo y los besuqueos típicos de la ocasión.
Fue una noche de vueltas. Claro, deambulé por todos lados. Pero la de vueltas que dieron las emociones esa noche, ni les cuento.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

jajaja....
eeella la escritora xP!
me gustó
porque dentro de esa historia verídica salí nombrada (=

bacán tu blog
ya loquillo te dejo
un besito
tu sabes que te estimo mil

Mariela

Anónimo dijo...

tremenda noche que momentos no...
marchant no quedo conforme con lo que dio pero en fin sera el el rey el proximo año, gritar a los malditos rojos fue un desahgo de mil años nunca habia gritado algo tanto con el alma para mi la idea no era ganar si no ahcer perder a estos flaites de tercero solo falto un poco de accion que se fueran en mala y alianza contra alianza a los puños muchos nos quedamos con esas ganas un sueño, pensar que ibamos perdiendo pareci yo ahi quien lo hubiera pensado pareja por alianza y yo pues solo acepte y ella sabia que seria con ella antes antes de yo responder a la peticion que hacia guillermo desde lejos me miraban esperando a ver la cara que yo pondria jajaja el ver yo que estaban esperando mi respuesta acepte y peor nervioso a full y con ella amarrado no se como les fue a las otras parejas para mi fue abrir y cerrar de ojos y ya estaba celebrando abrazado a ella jajajaja la vida y sus vueltas no diego amigo creo que tambien usare tu espacio para decirte como fueron las cosas desde mi punto de vista escribe mas seguido por aca yo no fallare en mi intento de redactar algo coherente y que no aburra...amistades de verdad vale!

Anónimo dijo...

jaja wEna man crei k soy flaite :S jaja nO me importa = toy con la daniela tu opinion da lo mismo lo ke importa es ek nOs keremos eso entodo caso nO importa ke sea flaite lo dices por ke nO me conOces xD mmm k es peor ser flaite o jotiarse a una mina cuando esta con su pololo mmm bueNa pregunta cierto ??? piensa las cosas antes de decirlas en todo caso mmm ^^ es bonita la daniela te comprendo ^^

Anónimo dijo...

jajajajaja
ola po ninio
ta mui bkn la historia
ya k toi nombradita
puxis ninio
m cae mui iien
i lo e kerio en este tiempo
mxas gracias x escuxarm
sigue escribiendo asi po
XD !!


_________________________Jacqueline*